Ella no lo puede evitar, ve a la cámara y enseguida sonríe. es un reflejo condicionado. su sonrisa es inapropiada dadas las circunstancias.
En el año 2009 cuando Martha Heredia gano el latin american idol ella fue para mi al igual que para todos los dominicanos otro tipo de heroína, una que nos hizo sentir felices sin tener que consumir nada raro, ese tipo de éxtasis que solo se logra con las cosas vividas no con el efecto artificial de una droga, es muy triste el caso cuando el pasado miércoles fue detenida intentando viajar con mas de un kilo de heroína.
Conozcamos mas acerca de esta peligrosa droga.
¿Qué
es la heroína?
La
heroína es una droga ilegal altamente
adictiva.
No sólo es el opiáceo de más
abuso
sino que también es el de acción
más
rápida. La heroína se procesa de la
morfina,
sustancia que ocurre naturalmente y
que
se extrae de la bellota de ciertas variedades
de amapolas también conocida como “adormidera asiática”.
La heroína suele
presentarse en forma de polvo blanco o marrón, o como una sustancia negra y
pegajosa conocida como “alquitrán negro”.
¿Cómo se abusa la heroína?
La heroína se puede inyectar, inhalar o fumar,
realizando todas estas vías de administración una entrega rápida de la droga al
cerebro. Para inyectarse se usa una aguja que libera la droga directamente en
el torrente sanguíneo. El inhalar o "snorting" consiste en aspirar el
polvo de la heroína por la nariz donde se absorbe a través de los tejidos
nasales llegando al torrente sanguíneo. Al fumar la heroína se inhala el humo,
llegando directamente a los pulmones. Los tres métodos de consumo pueden llevar
a la adicción a la heroína y a otros problemas graves de la salud.
¿Qué otros efectos adversos a la
salud produce la heroína?
El abuso de la heroína está asociado a consecuencias graves en la salud,
incluyendo sobredosis mortal, aborto espontáneo y, particularmente en el caso
de los consumidores que se inyectan la droga, enfermedades infecciosas como el
VIH/SIDA y la hepatitis. El consumo crónico puede llevar a la oclusión de las
venas, infección del endocardio y de las válvulas del corazón, abscesos y
enfermedades del hígado y renales. También puede haber complicaciones
pulmonares, incluyendo varios tipos de neumonías, tanto como resultado del mal
estado de salud del toxicómano como por los efectos depresores de la heroína
sobre la respiración. Además de los efectos de la droga en sí, la heroína que
se vende en la calle a menudo contiene contaminantes tóxicos o aditivos que
pueden obstruir los vasos sanguíneos que van a los pulmones, hígado, riñones o
cerebro, causando daño permanente a estos órganos vitales.
El consumo crónico de la heroína
produce dependencia física, un estado en el que el organismo se adapta a la
presencia de la droga. El consumidor puede experimentar síntomas graves del
síndrome de abstinencia si disminuye o descontinúa abruptamente el uso. Estos
síntomas, que pueden comenzar a las pocas horas de la última administración de
la droga, pueden incluir desasosiego, dolores en los músculos y en los huesos,
insomnio, diarrea y vómito, escalofríos con piel de gallina (“romper en frío” o
“cold turkey”) y movimientos en forma de patadas (“kicking the habit”).Pulmones, hígado, riñones o cerebro, causando daño
permanente a estos órganos vitales.
Durante este periodo,
los usuarios también sienten deseos vehementes por la droga, lo que puede
ocasionar que continúen o recaigan en su uso. Los principales síntomas del
síndrome de abstinencia alcanzan su punto máximo entre las 48 y 72 horas
después de la última dosis y generalmente desaparecen después de
aproximadamente una semana. Sin embargo, algunas personas pueden padecer los
síntomas del síndrome de abstinencia durante meses. A pesar de que la
abstinencia de la heroína se considera menos peligrosa que la del alcohol o la
de los barbitúricos, ocasionalmente puede ser mortal cuando un toxicómano con
una dependencia fuerte a la droga y en mal estado de salud deja abruptamente de
consumir esta droga. Además, el deseo de la droga puede persistir por años
después de haber dejado de consumirla, especialmente si el usuario se expone a
factores que pueden provocar el deseo, tales como el estrés o ciertas personas,
lugares o cosas relacionadas con el uso de la droga.
¿Qué opciones de tratamiento
existen?
Hay
una gran variedad de opciones terapéuticas para la adicción a la heroína,
incluyendo los medicamentos y la terapia conductual. La ciencia ha demostrado
que la farmacoterapia, en conjunto con otros servicios de apoyo, constituye una
combinación eficaz para lograr que el paciente deje de consumir heroína (u otra
sustancia opiácea) y vuelva a una vida más estable y productiva.